El matrimonio de Ángel y Ibis en Santiago de Surco, Lima

La crónica de nuestro matrimonio

Nuestro matrimonio fue a las 8 pm y empezamos el día a las 7 am. Estuvimos muy tranquilos ambos, cero nervios, lo único que nos estresaba un poco era salirnos del timing que teníamos planificado, ya que el día de la boda pasa en un abrir y cerrar de ojos. Eso es algo que hasta ahora me llena de sentimentalismo, ya que poniendo en la balanza la planificación de meses versus lo que dura la boda, en mi opinión, realmente se disfruta muy poco.

Pero dejando esto de lado, fue un día muy tranquilo y muy especial, con algunos imprevistos, porque nada te puede salir perfecto. Hay muchas cosas inevitables así que ante lo que sucedió sólo nos quedó respirar y seguir adelante, ya que una de las cosas que teníamos claras (porque muchas personas nos lo aconsejaron) era que nada nos debía cambiar de actitud y opacar nuestro momento, porque los novios nos merecemos celebrar este único día en la vida al máximo.

Es tanto lo que se invierte, no sólo con el tema económico, sino que realmente consideramos que si dos personas deciden unir sus vidas para siempre ponen muchísimas cosas en juego, apuestan por mucho, así que merecen disfrutar el día de su celebración al 100%, por eso decidimos delegar muchas funciones ese día entre nuestras damas, nuestra wedding day y una tía de mi esposo que nos ayudó muchísimo.