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Matrimonio

¿Casarse un viernes?: ¡descubran 8 increíbles ventajas!

Aunque el sábado por tradición es el día más señalado para darse el esperado 'sí, acepto', hay muchas parejas que unirán sus vidas un viernes, pues es una opción igual de buena. ¡No se pierdan las ventajas de casarse en ese día!

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Ray Valdivia

Darse el “sí, acepto” un viernes es una excelente opción. Así que, si están buscando una decoración para matrimonio, pueden empezar por el día. Pero no solo eso. También tendrán libre todo el fin de semana –lo que les permitirá alargar la celebración todo lo que deseen y compartir más tiempo con familiares y amigos– y tendrán más posibilidades a la hora de elegir, ya sea fechas, lugares o diferentes proveedores. Es el caso del profesional de arreglos florales para boda, del DJ que hará sonar las distintas canciones que ambientarán a lo largo de toda la jornada, del auto de matrimonio o de la peluquería que se encargará de hacerte ese fantástico peinado de novia, por ejemplo. Unas razones que justifican que cada vez más parejas decidan casarse un viernes. ¿Quieren descubrir muchas más?

1. Más posibilidades a la hora de elegir

Se trata de una de las principales ventajas de celebrar el matrimonio el viernes. Y es que, al ser un día menos demandado, tendrán más espacios libres tanto para la ceremonia como para la celebración. Además, como les decíamos al inicio, les resultará más fácil contratar a los proveedores que les gustan para la fecha elegida, ya que no habrá tantas solicitudes para ese día. Y quizá se puedan beneficiar de algún tipo de descuento u oferta, como unos centros de mesa para boda personalizados –que podrá ir a juego o no con la decoración de local para matrimonio –.

Making Focus

2. No suelen coincidir con otros matrimonios

Al escoger el viernes como día de celebración, es más que probable que sean el único banquete nupcial que el proveedor tenga ese día, por lo que el trato será mucho más personalizado y el ambiente más íntimo y tranquilo que si se decantan por un sábado. Y será mucho más fácil no coincidir con otros matrimonios o compromisos que puedan tener sus seres queridos.

3. Una fiesta que se alarga

Una de las mayores ventajas que tendrán si se casan el viernes es que ningún invitado tendrá prisa por irse, puesto que les quedará todo el fin de semana para recuperarse de la fiesta. Nadie se querrá ir, así que elijan un calzado cómodo para la fiesta, como unos zapatos de novia planos.

En previsión de una larga noche de diversión, y más allá de los tradicionales dulces, no duden en incluir entre las muchas ideas para el candy bar opciones consistentes. Hablamos de cupcakes, de galletas, y de variados dulces, pero también de fuentes de frutas y chocolate, por ejemplo. Opciones saladas también son un acierto: salchipapas, pizzas, crepes, hamburguesas, empanadas, tequeños ... Así los invitados podrán reponer fuerzas a mitad de noche y seguir dándolo todo en la pista de baile al son de esa fantástica playlist que hayan elaborado para la ocasión.

Making Focus

4. Empezarán su vida de casados de forma relajada

Relajada y tranquila, pues podrán levantarse sin prisas y hacer todo lo que tengan previsto, como pasar el primer día de casados preparando las maletas para la luna de miel o bien ultimando detalles. Puede ser poniendo al día su Web de Matrimonio, por ejemplo, o bien consultando todas las fotografías que los invitados subieron al enlace de WedShoots, la aplicación gratuita de Matrimonio.com.pe.

5. Tendrán todo el fin de semana por delante

Casarse el viernes les deja libre todo el fin de semana para lo que ustedes deseen. Por ejemplo, tras alargar la fiesta al máximo, pueden dormir todo lo que quieran o recuperarse tras estar toda la noche bailando sin parar esas canciones románticas para bodas. ¡Incluso de la posible resaca!

Ray Valdivia

6. Podrán celebrar una pequeña postboda

Del mismo modo que se han popularizado las sesiones fotográficas postboda –en las que tendrán la oportunidad de volver a lucir sus respectivos outfits nupciales y retratarse con ellos de forma mucho más tranquila y sin prisas después del día B–, el hecho de casarse el viernes posibilita que puedan alargar la celebración hasta el día siguiente, compartiendo con los familiares o amigos que deseen un fantástico desayuno o una agradable comida todos juntos. De este modo, el sábado podrán hacer una quedada postboda con los más íntimos para comentar los aspectos más emocionantes de la jornada. Algo que resultará especialmente práctico si han dormido todos juntos en el mismo hotel o en la misma finca, por ejemplo. ¡Nadie querrá que su mágica cita nupcial acabe! ¿Quieren ir un poco más allá? ¡Alarguen la celebración todo el fin de semana! No habrá mejor manera de empezar su vida de casados que rodeados de su familia y amigos. ¡Está claro que todo son ventajas!

7. Sus invitados los acompañarán en una fecha tan especial

Elijan la fecha que elijan para su paso por el altar, lo que está claro es que sus seres queridos no les fallarán. Quizá alguno haya tenido que pedir el día libre para poder acompañarlos, pero no duden que quienes recibieron sus tarjetas de matrimonio elegantes estarán deseando compartir con ustedes un día tan especial en el calendario. Lo que de verdad importa es estar todos juntos, no el día de la semana que sea.

Julio Carnero

8. ¿Qué hay de las personas que vienen de fuera?

Dependiendo de los kilómetros de distancia, es probable que los seres queridos que tengan que desplazarse para acompañarlos en su paso por el altar deban tomarse el día de la celebración de vacaciones, si bien también es cierto que no tendrán que irse al día siguiente sin haber descansado apenas. Asimismo, y como cuando se levanten será todavía sábado, podrán hacer turismo por la ciudad o el municipio donde darán el “sí, acepto”. Acompáñenlos, aprovechen para enseñarles lugares emblemáticos del lugar y llévenlos a comer sabrosas recetas propias de la tierra. El domingo ya podrán volver tranquilamente a la casa.

¿Convencidos de todos los beneficios de casarse el viernes? ¡Son muchos y de lo más variados! Además, recuerden que lo esencial no cambia, como la espera impaciente del prometido hasta la llegada del amor de su vida, la magia y el romanticismo que envolverán la jornada o la diversión asegurada que les ofrecerá la fiesta final, rodeados de quienes recibieron los partes de matrimonio y perfectamente engalanados para la ocasión, luciendo sus mejores trajes y vestidos de fiesta. Todos los presentes lo agradecerán y ustedes, que ya estarán listos para partir con destino a ese fantástico viaje de novios, también.

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